Escuchaba en estos días al Senador Nacional Oscar Parrilli refiriéndose a Los Magistrados Judiciales como “sarnosos”, porque quienes padecen sarna como Usted afirma son sarnosos. O mejor dicho, que así los percibía “toda” la sociedad. Dos generalizaciones lanzadas a “boca de jarro” por el alto funcionario K, que voy a tratar de desmenuzar.
La mal llamada sarna (este nombre se reserva para la “Sarna Animal” manejada por los Médicos Veterinarios), es la ESCABIOSIS en el ser humano, ya que la produce un parásito del grupo de los ácaros llamado Sarcoptes Escabiei.
La clínica presenta mucho prurito, eritema regional o generalizado, lesiones escamosas, pustulosas con impétigo o no, producto del intenso rascado y la contaminación bacteriana posterior.
Esto no es lo importante, lo importante es la lesión que se ve al microscopio y consiste en los túneles que produce el parásito, en su ingreso y recorrida por la piel.
Túneles tortuosos y oscuros, como los recorridos que realizaban funcionarios operativos en la secretaría de inteligencia que Usted dirigió. “Primera generalización”.
Respecto de que toda la comunidad ve a los funcionarios de la justicia como sarnosos, es una generalización desmesurada debiendo entender Usted Señor, que muchos argentinos no adherimos a su postura. Entre ellos yo, que nada tengo que ver con el ámbito de la justicia, soy profesional de la medicina y no considero a los funcionarios judiciales sarnosos.
Finalmente, Señor Senador de la Nación, como ciudadano, espero mesura de quienes integran esa cámara alta, aplomo, sabiduría, ética y tantos otros valores. De lo contrario, todos los ciudadanos de a pie estaríamos habilitados para usar indiscriminadamente el calificativo que utiliza la actual Vicepresidente de la Nación cuando se dirige a Usted como pelotudo, lo que seguramente, debe ser UNA GENERALIZACIÓN DESPRECIABLE.
Muchas gracias por escucharme.
Dr. Alejandro Vilches – MN 92217 – DNI 12.890.282